La Municipalidad de Mendoza anunció que el refugio nocturno para personas en situación de calle, inaugurado el 28 de junio en calle San Juan, entre Alem y Garibaldi, seguirá abierto una semana más de lo previsto, hasta el 7 de septiembre, debido al temporal que atraviesa gran parte de la provincia y a las persistentes bajas temperaturas.

El espacio, que dispone de 40 camas y actualmente recibe a más de 30 personas, fue creado como parte del plan de contención invernal y en principio iba a funcionar hasta el 31 de agosto. El intendente Ulpiano Suarez confirmó la prórroga, asegurando que "la prioridad es brindar un espacio seguro y digno para quienes más lo necesitan en este contexto climático adverso".

El albergue abre todos los días de 20 a 11 horas, ofreciendo ducha caliente, cena, desayuno, calefacción y acompañamiento profesional. Fue puesto en marcha gracias a un acuerdo entre el municipio, el Arzobispado de Mendoza y la Fundación Huentala, con apoyo del Liceo Militar General Espejo, que aportó camas. Además, la Pastoral Social colabora con la cena y hoteles del Grupo Huentala aportan el desayuno.

La coordinación está en manos de promotores de derechos, junto a preventores y efectivos policiales, con un sistema de control biométrico en el ingreso y reglas de convivencia consensuadas con los alojados. Se da prioridad a personas mayores y con residencia en la Ciudad.

El dispositivo también incluye la asistencia de psicólogas del Ministerio de Salud, talleres de capacitación laboral y vínculos con empresas para favorecer la reinserción social de los beneficiarios.

Con esta medida, la comuna busca mitigar el impacto del frío extremo, brindando contención y resguardo a quienes atraviesan la vulnerabilidad de no tener un techo donde dormir durante este temporal.