La Ciudad de Mendoza fue protagonista de una nueva edición de "Domingo en la Sarmiento", una iniciativa que transformó el emblemático tramo entre Belgrano y Chile en un paseo peatonal con identidad propia. Durante toda la jornada, vecinos y turistas recorrieron el lugar para degustar delicias locales, disfrutar de shows en vivo y empaparse del espíritu mendocino en un evento que apuntala el desarrollo gastronómico y cultural del centro.

Impulsada por el municipio junto al sector privado, la propuesta tuvo como productos estrella a los papines andinos y el aceite de oliva, emblemas de la cocina local. Con opciones que iban desde los $5.000 hasta los $10.000, los restaurantes ofrecieron menús exclusivos que incluyeron desde hamburguesas de jabalí y lomitos en pan de papa, hasta empanadas tradicionales y vinos de bodegas mendocinas.

"Estamos muy satisfechos con la gran respuesta del público, que sigue eligiendo esta calle por su oferta gastronómica y su ambiente único", señaló Yamila Meljim, secretaria de Desarrollo Económico y Turismo. Remarcó además que se trata de una estrategia sostenida de cooperación entre lo público y lo privado.

La experiencia fue realzada por una atmósfera musical vibrante. DJ Dani Flores animó el mediodía desde el stand de Balcony Bar, mientras que Biciswing, Samuel Aspee y Melezca musicalizaron la tarde con presentaciones en vivo. Además, artesanos y emprendedores de la economía social ofrecieron creaciones únicas en cerámica, tejidos y cestería, aportando calidez y diversidad a la propuesta.

Uno de los focos principales fue el aceite de oliva mendocino, que contó con un espacio de degustación y un stand informativo coordinado por Asolmen. Su gerente, Mario Bustos Carra, destacó que eventos como este "acercan nuestros productos al público y posicionan la calidad diferencial del aceite con indicación geográfica, el único con este sello en América".

Desde el sector gastronómico privado, también hubo gran entusiasmo. Diego Baigorria, de Paisana Cantina Cordillerana, resaltó: "Diseñamos platos chicos y accesibles para que la gente pruebe diferentes sabores. La experiencia es mucho más que solo comer, es vivir Mendoza". A su vez, celebró la participación de emprendedores, hoteleros y productores que ya buscan sumarse a futuras ediciones.

En esa línea, Matías Bismach, de la Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica y Afines, subrayó: "Estamos trabajando en fortalecer la identidad de esta calle como un verdadero polo gastronómico mendocino". También Miguel Urmeneta, gerente del Park Hyatt Mendoza, opinó: "Es una excelente oportunidad para que los locales también descubran la oferta de nivel internacional que hay en esta zona".

Durante el evento, la Sarmiento se convirtió en un gran comedor al aire libre. Las veredas se llenaron de mesas que los propios locales colocaron para que comensales pudieran disfrutar sus platos en un ambiente relajado, mientras el sol otoñal acompañaba el clima de encuentro. Amigos, familias y parejas se distribuyeron a lo largo de las tres cuadras para compartir comida, vino y buena música.

Entre los presentes, Mauricio, vecino de la Sexta Sección, opinó: "Nos pareció una excelente propuesta para salir de la rutina, disfrutar de la ciudad y comer rico". Por su parte, Carla, una turista de Rosario, relató: "Lo descubrimos de casualidad paseando por el centro y fue una linda sorpresa. Probamos de todo y nos llevamos unos souvenirs. Es una muestra hermosa del espíritu mendocino".

Con este tipo de iniciativas, la Ciudad de Mendoza reafirma su lugar como destino gastronómico y cultural, articulando identidad local, promoción turística y dinamismo económico en una experiencia integral. "Domingo en la Sarmiento" se consolida como una apuesta fuerte a la calidad, la colaboración y el disfrute ciudadano.