El feriado generó un movimiento masivo de autos hacia el país vecino, y como resultado las demoras para cruzar a Chile por el Paso Internacional Cristo Redentor fueron de hasta tres horas.

Solo quienes partieron bien temprano pudieron atravesar la frontera sin mayores problemas, ya que durante las primeras horas del día los tiempos de espera en el complejo Los Libertadores eran de unos 30 minutos. Pero a medida que avanzó la mañana, la cantidad de vehículos fue aumentando y las filas se hicieron cada vez más largas.

Alrededor del mediodía, la espera llegó a ser de tres horas completas y las colas de autos alcanzaban los cobertizos. Recién cerca de las 15 se notó una mejora: los tiempos de cruce se redujeron a unas dos horas.

Todo parecía indicar que la atención en Los Libertadores se iba a normalizar, ya que el paso fronterizo estaría abierto todo el día. Sin embargo, un accidente en la ruta 7, antes de llegar al puente de Hierro en Uspallata, obligó a interrumpir el tránsito.

Fue recién pasadas las 17 cuando la circulación volvió a habilitarse, luego de que personal policial y del Servicio de Emergencias Coordinado asistiera a las dos personas heridas, un hombre y una mujer, que viajaban en el auto que volcó.

Actualmente, las demoras en el complejo chileno rondan las dos horas y media. Según datos oficiales, ayer cruzaron a Chile 5.535 personas, mientras que 3.557 ingresaron a la Argentina.