Turismo en Mendoza: crearon una herramienta tecnológica para reducir costos y reactivar el sector
Marcelo Rosental presentó "B2B" el nuevo marketplace hotelero y analizó la crítica situación del sector turístico en Mendoza.
La Cámara Hotelera de Mendoza lanzó Mendo B2B, una plataforma que permite a agencias de viajes y turismo contratar alojamientos directamente, sin intermediarios y con costo cero para ellas. La iniciativa busca reducir comisiones, mejorar la competitividad y ordenar un mercado afectado por la informalidad y la falta de regulación.
En diálogo con Radio Jornada 91.9, Marcelo Rosental, representante de la Cámara, valoró el desarrollo de esta herramienta digital, pero advirtió que el turismo está atravesando una profunda crisis, producto de la caída de visitantes, la pérdida de competitividad regional y los altos costos impositivos y operativos. También apuntó a la necesidad urgente de infraestructura y de una política nacional que incentive el turismo interno.
Una herramienta para bajar costos y ordenar el mercado
Mendo B2B es un marketplace de comercialización hotelera que permite a agencias de turismo minoristas, tanto de Mendoza como del resto del país, contratar alojamientos de manera directa, con tarifas preferenciales y sin costos adicionales. La iniciativa fue posible gracias a un aporte no reembolsable del Ministerio de Infraestructura, que permitió a la Cámara Hotelera avanzar en el desarrollo tecnológico.
"No es una app, es un marketplace B2B", aclaró Rosental, y explicó que el objetivo principal es reducir la cadena de comercialización, lo que permite abaratar costos para los hoteles y eliminar comisiones para las agencias. La herramienta también apunta a transparentar la oferta turística, priorizando a los alojamientos registrados y habilitados, frente a un mercado informal que hoy opera sin controles.
Turismo en crisis en Mendoza
Rosental fue enfático al describir el estado actual del sector: "Hoy el turismo en Argentina está en crisis". Según señaló, Mendoza registra una baja del 15 al 20% en la cantidad de visitantes en comparación con el año pasado, tanto en turismo interno como internacional.
Uno de los principales problemas, indicó, es la pérdida de competitividad frente a otros destinos de la región. "Hoy las divisas rinden más afuera. Hay paquetes a Brasil por 500 dólares, con siete noches, y acá estamos carísimos", afirmó. A eso se suman los altos costos laborales -que en Argentina representan un 58% frente al 25% de otros países latinoamericanos-, la presión impositiva y la dependencia de insumos importados.
Falta de infraestructura e informalidad
El representante hotelero también puso el foco en las carencias estructurales que enfrenta la provincia para consolidarse como destino turístico internacional. "Falta infraestructura vial, en la alta montaña, señalización, baños públicos. Nos falta mucho todavía", reconoció. También remarcó que las inversiones privadas en hotelería recién se ven cuando el mercado proyecta una mejora futura, y que muchas obras actuales apuntan a un cambio de matriz productiva en los próximos años.
Otro de los temas críticos es la informalidad en la oferta de alojamiento. Rosental reclamó una legislación provincial clara, como tienen Bariloche o Buenos Aires, que impida que se publiquen alojamientos no registrados. "Si Booking o Airbnb no te levantan, ya tenés el 80% de la batalla ganada", sostuvo, y señaló que la seguridad turística también pasa por garantizar al visitante que el alojamiento que contrata cumple con normas básicas y seguros.
Turismo interno e incentivos que no llegan
A pesar de que el turismo de cercanía fue una alternativa en pandemia, Rosental lamentó que no existan hoy incentivos de largo plazo para fomentar los viajes dentro del país. "No hay políticas que alienten el turismo interno. No digo cuál, pero alguna política impositiva o económica tendría que existir de manera permanente", planteó.
Según explicó, aunque algunos municipios hicieron esfuerzos puntuales, se necesita una estrategia nacional. "Hoy el argentino que puede viajar elige gastar donde le rinda más. Y si no hay incentivo, se va afuera", concluyó.