Scouts en Mendoza: vínculos, solidaridad y educación para la vida
En la provincia, más de 1.500 personas integran el movimiento que fomenta amistad, compromiso social y educación ambiental
Cada 5 de septiembre, los scouts celebra su día en Argentina. Se trata de un movimiento con más de un siglo de historia que, lejos de limitarse a las actividades recreativas, propone un modelo educativo no formal que acompaña a niñas, niños y jóvenes en su crecimiento personal y social.
En diálogo con Radio Jornada 91.9, Francesco Delchiérico, asistente de comunicación de Scouts Argentina, explicó cómo esta experiencia de vida impacta en la formación de valores, en el fortalecimiento de vínculos y en la participación activa de los jóvenes en la comunidad mendocina.
Una filosofía de vida: el "siempre listo"
El movimiento scout nació a principios del siglo XX, impulsado por el militar británico Robert Baden Powell. Su lema, "siempre listo", condensa una manera de mirar la vida: estar preparados para afrontar desafíos, acompañar a otros y construir comunidad.
"Lo que propone el Movimiento Scout es que los jóvenes sean protagonistas y puedan desarrollar habilidades para la vida", explicó Delchiérico. En ese sentido, cada actividad -desde un campamento hasta una tarea solidaria- se convierte en una experiencia de aprendizaje que fortalece la autonomía y la responsabilidad personal.
Formación que trasciende la infancia
Aunque muchas veces se asocia a los scouts con la niñez, el movimiento abarca distintas etapas, desde los 7 hasta los 21 años. En cada rango etario, se promueve una formación progresiva que incluye liderazgo, trabajo en equipo y la capacidad de tomar decisiones.
"Es un camino de crecimiento. Los chicos van asumiendo responsabilidades de acuerdo a su edad, y eso los prepara para la vida adulta", señaló el representante de Scouts Argentina. La propuesta incluye tanto juegos como instancias de reflexión, con un fuerte anclaje en la educación no formal.
Servicio y compromiso en la comunidad mendocina
En Mendoza, los grupos scouts tienen una presencia activa en la vida comunitaria. Se los puede ver colaborando en emergencias climáticas, en operativos solidarios o en grandes eventos como la Fiesta Nacional de la Vendimia.
"Los scouts somos parte de la comunidad, no algo aislado. Lo que hacemos es tender la mano y poner nuestras habilidades al servicio de los demás", destacó Delchiérico. Esta vocación de servicio, combinada con la construcción de vínculos duraderos, es lo que mantiene vigente al movimiento a más de un siglo de su creación.