La Cámara de la Construcción advierte por pérdida de empleo y parálisis del sector
Martín Sanchís, presidente de la entidad, advirtió que la paralización de obras pone en riesgo empleo y frena la construcción en Mendoza
La construcción, uno de los motores tradicionales de la economía mendocina, enfrenta un panorama complicado: la paralización de la obra pública nacional y la cautela del sector privado mantienen al sector prácticamente detenido. Martín Sanchís, presidente de la Cámara Argentina de la Construcción Delegación Mendoza, explicó en "Matinal" en Radio Jornada 91.9 cómo esta situación afecta a empresas y trabajadores.
Según Sanchís, la obra pública provincial está activa, pero los fondos y licitaciones aún son insuficientes para reactivar completamente la actividad. La espera de definiciones políticas y económicas mantiene a muchas empresas "a pulmón", mientras la especialización de la mano de obra corre riesgo de perderse ante la inactividad prolongada.
El freno de la obra pública y privada
La paralización de la obra pública nacional y la escasa actividad de la privada mantienen al sector estancado, aseguró Sanchís. "Mendoza tiene obra pública provincial, pero no alcanza para cubrir la necesidad del sector. Se ven precios muy bajos en licitaciones y muchas empresas con poco trabajo", explicó.
El presidente de la Cámara resaltó que la reactivación depende en gran medida de decisiones políticas y de estabilidad económica: "Si el mercado se tranquiliza y la inflación se estabiliza, la construcción puede traccionar y ayudar a la economía en general".
Costos altos y el impacto en la inversión
Otro desafío que enfrenta la construcción en Mendoza es el aumento de los costos, especialmente medidos en dólares. Martín Sanchís indicó que, pese a un dólar relativamente estable en los últimos meses, la inflación reciente encareció significativamente la inversión.
"El costo por metro cuadrado en dólares subió y eso desalienta a quienes quieren invertir en proyectos privados, especialmente inmobiliarios. Todo esto complica la planificación y sostenimiento de las empresas", señaló.
Peligro de pérdida de mano de obra calificada
Sanchís alertó sobre la posible pérdida de trabajadores especializados, un recurso que cuesta años formar y que hoy se ve amenazado por la baja actividad. "Cuando hay poca obra, la gente busca otras alternativas y el oficio se pierde. Recuperarlo después es muy costoso y lleva tiempo", dijo.
La falta de continuidad en los proyectos y la incertidumbre sobre futuras inversiones prolonga la inactividad y afecta directamente a empresas que intentan mantener su estructura laboral y operativa.