La exmandataria Cristina Fernández de Kirchner criticó al Tribunal Oral Federal 2 por limitar el régimen de visitas que se le impuso mientras cumple con prisión domiciliaria, tras la confirmación de su condena por parte de la Corte Suprema: seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, en el marco de la causa conocida como Vialidad.

A través de sus redes sociales, la exvicepresidenta acusó al Poder Judicial de distorsionar la Constitución Nacional y el Código Penal y Procesal para perjudicarla.

"Ayer el Tribunal tuvo que salir a aclarar que podía asomarme al balcón de mi casa. Hoy, mis abogados se vieron obligados a apelar otra decisión del mismo cuerpo, que solo habilita las visitas, con previa autorización, de mi entorno familiar directo, mis defensores y mis médicos", detalló.

Además, añadió una fuerte crítica: "Mis vínculos con el mundo exterior... amistades, colegas, personas con las que mantengo una relación por el simple hecho de vivir... también están siendo limitados de forma arbitraria".

Mientras tanto, su equipo de abogados presentó una solicitud formal ante la justicia para dejar sin efecto las restricciones. Según precisaron, el Tribunal ordenó elaborar un listado de personas autorizadas a ingresar, limitado al núcleo familiar, custodia policial y profesionales médicos y legales. Este registro debía entregarse en un plazo de 48 horas para ser aprobado.

Desde sus plataformas digitales, la líder del Partido Justicialista continuó: "Cada persona que quiera visitarme tendrá que pedirle permiso al Tribunal y esperar a que se lo concedan. Es un sistema de exclusión completamente caprichoso, sin antecedentes y que infringe mis derechos civiles más básicos".

La exvicepresidenta finalizó su mensaje con un tono irónico: "De mis derechos políticos, ni hablar... te los debo. ¿Existe acaso una Constitución y unos Códigos especialmente redactados para mí, que jamás me enseñaron en la facultad?".

El posteo surge luego de que la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, ingresara a la residencia de San José 1111 domicilio actual de la exmandataria sin autorización previa, y en menos de 48 horas desde el inicio de la prisión domiciliaria.

Los fundamentos jurídicos de su defensa

En el escrito presentado ante la justicia, Carlos Beraldi y Ary Llernovoy, abogados defensores, argumentaron que no corresponde exigir autorización previa para cada visita, considerando su rol como referente del Partido Justicialista.

En el documento, destacaron que "toda persona que cumple una condena bajo arresto domiciliario puede realizar cualquier actividad no prohibida por la ley" y subrayaron que, a pesar del fallo, Cristina Kirchner conserva la totalidad de sus derechos humanos, tanto civiles como políticos.

Los letrados también hicieron mención a líderes políticos internacionales, como el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien ya expresó su deseo de reunirse con la expresidenta.

"No parece razonable señalaron que este tipo de encuentros dependa de una autorización judicial. Los derechos políticos y partidarios de Cristina Fernández de Kirchner no pueden ser cercenados bajo la excusa de una norma de conducta que condiciona su contacto con otros dirigentes a una evaluación judicial previa".

Apelando al principio de legalidad establecido en el artículo 18 de la Constitución, reclamaron que se le garanticen los vínculos con el entorno exterior, en la máxima amplitud posible, para asegurar el pleno ejercicio de sus derechos.

También indicaron que hasta ahora no se ha explicado con claridad cuál será el criterio que empleará el Tribunal para aprobar o rechazar los pedidos de ingreso, lo cual abre la puerta a decisiones arbitrarias.

Finalmente, advirtieron que si se mantiene esta restricción "se estarán vulnerando no solo sus garantías individuales, sino también las de millones de personas que ella representa, afectando directamente al sistema democrático y republicano en su conjunto".