Los trabajadores de las plantas electrónicas en Tierra del Fuego, agrupados en la seccional Río Grande de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), iniciaron un paro total e indefinido desde este miércoles al mediodía. La medida se tomó en rechazo a la reciente decisión del Gobierno Nacional de eliminar aranceles a la importación de celulares, consolas y otros dispositivos electrónicos, lo que según el sindicato afecta gravemente a la industria local y a miles de puestos de trabajo en la isla.

"Es una acción en defensa de la industria fueguina", señaló el gremio en un comunicado. Además del paro, se espera una movilización en el centro de la ciudad como parte de las protestas. La medida fue aprobada en el Congreso de Delegados de la seccional, que advirtió que estos cambios ponen en riesgo décadas de desarrollo industrial en la región. "No vamos a permitir que más de 45 años de progreso y lucha se desmoronen por decisiones unilaterales que responden a intereses externos", declararon los representantes sindicales.

El paro cuenta con el respaldo del secretariado nacional de la UOM y otras seccionales del país, que se sumaron al pedido de una respuesta clara del Gobierno provincial, la cámara empresarial AFARTE, el Grupo Mirgor y la conducción nacional de la UOMRA para preservar los empleos en la provincia más austral del país.

Cambios en los aranceles

El conflicto se desencadenó tras el anuncio del vocero presidencial, Manuel Adorni, quien el martes confirmó una serie de rebajas en aranceles e impuestos internos a productos electrónicos importados. La medida, que se formalizará en los próximos días mediante un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), incluye:

• Reducción del arancel a celulares importados del 16% al 8% de forma inmediata y al 0% desde enero de 2026.

• Disminución de aranceles para consolas como PlayStation y Xbox del 35% al 20%.

• Baja de impuestos internos para celulares, televisores y aires acondicionados importados del 19% al 9,5%, y del 9,5% al 0% para los productos fabricados en Tierra del Fuego.

El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, defendió la decisión argumentando que "la reducción de estos aranceles puede impactar en algunos empleos en la isla, pero generará un ahorro significativo para millones de argentinos, liberando dinero para otros consumos".

Futuro incierto para la industria fueguina

El sindicato advirtió que mantendrá la huelga hasta que se logre una solución concreta que garantice la continuidad de la producción local y la protección de los derechos laborales. Además, el gobernador de Tierra del Fuego se sumó a las críticas, señalando que la medida compromete seriamente la sostenibilidad económica de la provincia.

Por su parte, desde el Gobierno Nacional se defiende la reforma asegurando que podría reducir hasta en un 30% los precios de estos productos para los consumidores, aunque sin precisar cómo se mitigarán los efectos negativos para la economía fueguina.