La misión técnica del Fondo Monetario Internacional finalizó su paso por la Argentina este viernes, con un balance calificado como "constructivo" respecto a las conversaciones mantenidas con el equipo económico nacional. El encuentro tuvo como eje la evaluación de las metas del nuevo acuerdo de facilidades extendidas (EFF) y fue liderado por Bikas Joshi, jefe de misión del organismo para el país.

Según confirmaron fuentes del FMI, se completó la primera revisión del entendimiento vigente, aunque anticiparon que en los próximos días seguirán trabajando en los detalles técnicos y anunciarán formalmente los pasos a seguir.

El Gobierno argentino, por su parte, espera con atención la próxima conferencia de prensa que brindará Julie Kozack, directora de comunicación del Fondo, desde Washington, donde podría haber más precisiones sobre el rumbo del acuerdo.

Aunque desde la Casa Rosada destacan un sobrecumplimiento en las metas fiscales, uno de los puntos aún sin resolver es la acumulación de reservas internacionales, un objetivo que el BCRA no ha podido cumplir debido al esquema de flotación cambiaria implementado por Javier Milei y Luis Caputo. En ese contexto, se analiza la posibilidad de solicitar al FMI un "waiver", es decir, una excepción formal por el incumplimiento.

Desde el Ministerio de Economía remarcan que Argentina alcanzó en lo que va del año un superávit primario del 0,8% del PBI y un superávit financiero del 0,3%, tras los pagos de deuda, superando en ambos casos los objetivos pactados con el organismo.

Ante empresarios reunidos en el evento Somos Pymes, el ministro explicó que el déficit de la cuenta corriente, que superó los US$5.000 millones en el primer trimestre, responde a inversión privada y demanda externa, y no a un desequilibrio del Estado. "Ese rojo ya no financia al sector público, sino al privado", aseguró.

También aprovechó para responder a críticas de los economistas Domingo Cavallo y Ricardo Arriazu, quienes alertaron sobre la falta de reservas. Según el funcionario, hoy el programa funciona porque, a diferencia de otras etapas, existe una decisión política de sostener el orden fiscal y monetario. "Para quienes piensan que esto ya pasó, les digo: no, esto no lo vivimos antes", sentenció.