La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, defendió con firmeza la detención del dirigente Juan Grabois, quien fue arrestado luego de la ocupación del Instituto Nacional de Estudios e Investigaciones Históricas Juan Domingo Perón. Aseguró que la intención del Gobierno es dejar un mensaje contundente frente a las usurpaciones.

En diálogo con Radio Rivadavia, Bullrich respaldó el accionar de las fuerzas que llevaron a cabo el desalojo de Grabois y miembros del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE). "Que quede claro que con este Gobierno no se juega. El que comete una falta, se hace cargo", lanzó la funcionaria.

Según explicó, lo sucedido no fue un hecho aislado, sino parte de una postura clara del Ejecutivo para frenar intentos de tomas: "El mensaje no es sólo para Grabois, sino para todos los militantes que pretendan sacar ventaja de este tipo de situaciones", subrayó.

"Quien ocupa un lugar ilegalmente, termina detenido", dijo Bullrich al referirse al cierre del Instituto Perón como parte del plan de recortes en el Estado. "No vamos a sostener espacios partidarios del PJ con fondos públicos. Lo importante es actuar frente al desorden".

En respuesta a las declaraciones de Grabois, quien al ser liberado denunció el estado de las comisarías, Bullrich fue irónica: "Ahora se dan cuenta de cómo están las instituciones después de 16 años en el poder. Eso es un chiste", expresó. Afirmó además que hay reformas en marcha para mejorar el sistema de seguridad.

Durante el operativo, según Bullrich, cuatro efectivos quedaron retenidos dentro del edificio, lo que justificó una respuesta inmediata: "Hubo violencia y privación de la libertad, por eso se actuó. La decisión fue firme: el que toma, va preso".

La ministra resaltó que la orden fue directa: "Ingresamos y lo desalojamos porque el presidente Milei tiene como prioridad garantizar el orden". Luego agregó: "Antes estas tomas podían durar semanas, ahora el accionar es inmediato. Si la Justicia lo liberó hoy, es una decisión judicial", aclaró.

Bullrich también apuntó contra la trayectoria de Grabois, indicando que tiene otros antecedentes vinculados a usurpaciones, donde suele mantenerse al margen "colocando a otros como cara visible para no asumir responsabilidades".

Desde el Gobierno aclararon que el accionar no fue dirigido específicamente contra Grabois. "No importa el nombre, el mensaje es para cualquiera que quiera vivir del Estado o abusarse de los recursos públicos. Ya no se premia al que toma, ahora pierde y termina preso", enfatizó.

Por último, la ministra consideró que sectores kirchneristas buscarán utilizar políticamente lo ocurrido, aunque le restó importancia: "Pueden decir lo que quieran, pero nadie les cree. Nosotros estamos mostrando hechos concretos. Lo demás son pavadas".