El escándalo que sacudió al arco político este fin de semana dio de que hablar este lunes. Se trata del caso del concejal de Guaymallén, de Cambia Mendoza, Miqueas Burgoa, quien fue atrapado conduciendo alcoholizado en General Alvear. 

Afortunadamente, no hubo que lamentar una tragedia; sin embargo, el comportamiento irresponsable al volante es un hecho que no pude pasar por alto, así lo dio a entender el intendente Marcos Calvente, quien le sugirió al edil presentar su renuncia en el Honorable Concejo Deliberante (HCD). 

"Si fuese mi funcionario, le pido la renuncia. Se tiene que dar la investigación, yo lamento la situación, es un hecho grave", dijo Calvente, en una actividad que se llevó adelante en el Le Parc. 

El hecho tuvo lugar el sábado en la madrugada, cerca de las 5.20, en el distrito de Bowen, cuando volvía de un boliche acompañado de Emiliano Gobbi, asesor del senador provincial, Marcelino Iglesias. 

De acuerdo a la información policial, el concejal radical iba conduciendo y paso un semáforo en rojo. Acto seguido, efectivos que advirtieron la falta solicitaron detener la marcha del vehículo y le realizaron una prueba de alcoholemia. 

Finalmente, el test terminó arrojando 1,25 gramos de alcohol en sangre al momento del dosaje y el auto quedó retenido. En Mendoza, la alcoholemia permitida para conducir es de 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre.