Policías en andenes, control biométrico y monitoreo 24/7: así se cuida el Metrotranvía
La Unidad Policial Metrotranviaria, fuerza especializada de la Policía de Mendoza, combina tecnología, patrullaje permanente y asistencia a los usuarios para prevenir delitos en estaciones y paradores
Con patrullajes constantes, controles biométricos y un vínculo directo con los usuarios, la Unidad Policial Metrotranviaria (UTRAN) es una de las principales herramientas de prevención del sistema de transporte público de Mendoza. Con la conducción del subcomisario Gustavo Iribarren, la dependencia se encarga de la vigilancia de los 18 kilómetros de recorridos con 2 estaciones y los 25 paradores que integran el sistema del Metrotranvía.
Desde su creación, en 2012, la Policía de Mendoza, a través de la UTRAN, desarrolla un modelo de seguridad basado en la prevención: presencia activa en territorio, uso de tecnología, detección temprana de situaciones sospechosas y asistencia directa a los pasajeros.
Más de 14.000 controles para prevenir delitos
Entre julio de 2024 y mayo de 2025, la unidad realizó más de 14.000 controles biométricos en estaciones y paradores. Este recurso permite identificar personas con requerimientos judiciales y actuar de forma anticipada ante potenciales amenazas. A partir de esta herramienta, se concretaron 748 aprehensiones: 62 vinculadas a medidas judiciales y 9 correspondientes a personas con antecedentes penales o causas contravencionales.
La clave, destacan desde la unidad, está en intervenir antes de que ocurra el delito. El despliegue no se limita a la vigilancia: también apunta a construir un entorno seguro donde los usuarios se sientan acompañados.
Trabajo conjunto con la Empresa Provincial de Transporte Mendoza
Un factor fundamental de esta estrategia ha sido la coordinación con la Empresa Sociedad de Transporte Mendoza (STM). El trabajo articulado ha permitido sostener una presencia constante de efectivos tanto en las duplas del Metrotranvía como en los puntos fijos del recorrido.
A esto se suma el monitoreo permanente mediante las 261 cámaras de seguridad instaladas a lo largo del sistema. Este recurso posibilita la observación en tiempo real de lo que ocurre en estaciones y paradores, agilizando la detección de comportamientos anómalos y facilitando la intervención policial.
Asistencia y cercanía: un vínculo que fortalece la seguridad
Uno de los aspectos que distingue a la UTRAN es la cercanía de sus efectivos con los usuarios. Además de prevenir delitos, el personal brinda asistencia a diario: responde consultas sobre horarios, ayuda a orientarse en el recorrido e interviene en emergencias.
Ese contacto directo ha generado una relación de confianza con los pasajeros, que no solo recurren a los oficiales en situaciones de inseguridad sino también ante cualquier necesidad vinculada al servicio. En un sistema de transporte masivo, esa presencia visible y accesible cumple un rol fundamental. Asimismo, a través del programa Tejiendo Redes se brinda información a las instituciones escolares y sus actores.
Nuevas etapas, nuevos desafíos
Con las etapas 3 y 4 del Metrotranvía en planificación -la primera unirá Luján con Godoy Cruz y la segunda llegará hasta el Aeropuerto Internacional El Plumerillo-, la UTRAN se prepara para ampliar su cobertura. Esta expansión requerirá fortalecer el equipo policial y actualizar el equipamiento tecnológico, con el objetivo de sostener los niveles de seguridad alcanzados.
Modernización con molinetes: control y accesibilidad
En paralelo, avanza la incorporación de molinetes de acceso en las estaciones. El primer parador en implementarlos fue Lugones y se espera que el sistema se amplíe en los próximos meses.
Estos dispositivos mejoran el control de ingreso, se integran al sistema de monitoreo y están adaptados para personas con movilidad reducida. Representan así un paso más hacia un transporte más seguro, ordenado y moderno.