La investigación por el brutal asesinato de Federico Scattareggi, el panchero asesinado por su empleado de 18 años, avanza con el paso de los días y los encargados de llevar el caso en la Justicia trabajan para esclarecer el hecho de sangre que consternó al departamento de Godoy Cruz. 

Recientemente, se conoció un informe del Cuerpo Médico Forense que suma más datos sobre el violento ataque que sufrió la víctima, en sus últimos momentos con vida, cuando se encontraba en el local de comida, ubicado en el barrio Trapiche. 

El examen médico detallado al cadáver de Scattareggi reveló que sufrió 65 lesiones cortantes con un arma blanca, la mayoría en la espalda y tres de ellas letales en la zona del tórax. 

Los resultados del informe respaldaron la decisión que tomó el día el miércoles la fiscal de Homicidios, Florencia Díaz Peralta, por la imputación de Ángel Gastón Buenaventura, quien fue detenido el martes en su vivienda de Luján, con el teléfono de la víctima y diversos elementos que lo comprometen más a la causa. 

Para la fiscal, el ataque fue planificado debido a la magnitud de heridas que presentaba el panchero en su cuerpo. Si bien no hay una hipótesis definida, se cree que el atacante y la víctima mantenían una presunta relación.