PSG liquidó rápido al Real Madrid y es finalista del Mundial
El Paris Saint Germain (PSG) tampoco tuvo piedad con el Real Madrid, al que venció por un 4-0 que se queda muy corto para explicar la diferencia que hubo entre ambos equipos en la segunda semifinal jugada en el estadio Met Life.
El Paris Saint Germain (PSG) tampoco tuvo piedad con el Real Madrid, al que venció por un 4-0 que se queda muy corto para explicar la diferencia que hubo entre ambos equipos en la segunda semifinal jugada en el estadio Met Life. ante un lleno total, con 77.556 espectadores, la gran mayoría, hinchas del conjunto español.
El PSG jugará la final del Mundial de Clubes del próximo domingo, siempre en el estadio Met Life, ante el Chelsea, vencedor de la otra semifinal de ayer ante el Fluminense.
A los 24 minutos del primer tiempo, los franceses, actuales campeones de Europa, ya habían anotado los tres goles (dos de Fabián Ruiz, el primero a los nueve minutos, y otro de Ousmane Dembélé) y la diferencia pudo ser más amplia porque se erigieron en claros dominadores del juego, sin que sus rivales pudieran luchar con herramientas efectivas para quitarla. Ya en el final, el ingresado Gonçalo Ramos marcó el cuarto.
Con el partido definido muy pronto, cuando se habló de una gran paridad a priori, todo pareció estirarse sin demasiado agonismo, siempre con una notable superioridad de los franceses aunque ya en la segunda parte, Luis Enrique dispuso varios cambios hasta quedar con una delantera suplente, en tanto que en el Real Madrid pudo ingresar el croata Luka Modric, en su último encuentro oficial con la casaca blanca, antes de partir al Milan.
Gran inicio del partido, con llegadas claras en ambos arcos, aunque más claras para el PSG, primero, a los 5 minutos, con un remate cruzado de Fabián Ruiz, apenas desviado, otro que perdió Dembélé, que le tapó Courtois en el área chica e inmediatamente, en la jugada siguiente, un error de Raúl Asencio, que ingresó desde el principio, y Fabián Ruiz remató a voluntad, con el arco libre para marcar el primer gol.
Real Madrid ni pudo despertarse cuando otra gran jugada de Dembélé ante Rüdiger lo dejó solo ante Courtois, y definió con precisión para el 2-0, generando una rápida pesadilla para el madridismo.
Un partido tan hablado en la previa, con una supuesta paridad, que parecía totalmente definido antes de los 10 minutos. El PSG, desde allí, se apoderó de la pelota, la hizo circular para que su rival corriera a buscarla, y el georgiano Kharatsvelia se hacía imparable por la izquierda, con su velocidad, para el uruguayo Federico Valverde, como lateral a partir de la ausencia por lesión de Trent Alexander-Arnold que generó un cambio importante en la defensa con la decisión de Xabi Alonso de retrasar al volante y capitán, y colocar a Raúl Asencio al lado de Rüdiger como central.
A su vez, la rotación de posiciones con Vinicius Junior ahora a la izquierda, Mbappé al centro y Gonzalo García a la derecha, evidenciaba cómo Real Madrid no encontraba ni el partido ni la pelota. Las pocas veces que lograban avanzar, eran bien bloqueados por la defensa parisina.
Y a los 25 minutos, llegó el tercero, como crónica de un gol más que anunciado, con otro espectacular arranque desde el medio, dos jugadores que quedan libres en el área ante el desconcierto blanco, y Fabián Ruiz, que se sacó la marca de encima para convertir el 3-0 implacable.
Luego, los entendibles silbidos del público porque el PSG retenía mucho la pelota en el medio, con un juego de pases cortos, pero resulta que el Real Madrid, el derrotado, no iba a buscarla por miedo a quedar desairado. De hecho, el árbitro polaco Szymon Marciniak paró un peligroso contragolpe para los franceses que habría llevado a la gran polémica de haber estado el partido con un resultado menos amplio, y enseguida, otra vez Kharatsvelia se fue en velocidad y sacó un remate cruzado al que no llegaba Courtois, que se fue apenas desviado. Siempre la sensación era que cuando tomaba la pelota el PSG, el gol podía llegar.
A los 45 minutos, desde un córner por la derecha llegó otra clara posibilidad de gol para el PSG, cuando la pelota circuló hasta la izquierda a
Nuno Mendes, que prefirió sacar un potente remate que pudo rechazar Courtois, e inmediatamente después, Dembélé intentó otro remate desde la izquierda, esquinado, que el arquero belga del Real Madrid desvió por encima del travesaño.
El final de la etapa se pareció a un alivio para los blancos, que fueron netamente superados y estaban para recibir una goleada estrepitosa.
En el segundo tiempo, aunque sin cambios en la alineación, el Real Madrid se vio obligado a adelantar sus líneas, aunque no lograba profundizar en sus avances, mientras que fue evidente que el PSG bajó el ritmo, a partir de la larga ventaja que había sacado en el primer tiempo.
A los 13 minutos, el entrenador del PSG, Luis Enrique Maertínez, decidió reemplazar a Dembélé y Kharatsvelia por Barcola y Gonçalo Ramos, seguramente pensando ya en preservarlos para la final del domingo ante Chelsea.
Los blancos intentaron con algunos centro al área, o algún pase largo de Arda Güller, o alguna intromisión en el área por parte de Bellingham, pero sin resultados relevantes. Fue allí que Alonso dispuso tres cambios juntos a los 19 minutos: Luka Modric, Eder Militao y Brahim Díaz reemplazaron a Bellingham, Asencio y un muy apagado Vinicius Junior. Un minuto más tarde, Luis Enrique dispuso a Zaire-Emery por Fabián Ruiz y a Mayulu por Doué. El PSG pasaba a jugar los últimos 25 minutos con sus tres delanteros suplentes mientras que el croata Modric apuraba sus últimos momentos como jugador blanco, antes de pasar al Milan para la próxima temporada.
El partido había perdido la intensidad y el agonismo del primer tiempo, con la sensación de estar todo definido desde muy temprano. Incluso, dio lugar para otro momento emocionante cuando Alonso hizo ingresar a Dani Carvajal, lesionado por varios meses, en lugar de Gonzalo García.
A tres minutos del final, Ramos hizo un buen recorte dentro del área y definió de gran manera ante Courtois para establecer un lapidario 4-0.