Oscar Ustari, el arquero argentino del Inter de Miami, fue una de las figuras del primer tiempo, lo que puede determinar, con bastante claridad, cuál de los dos conjuntos estuvo más cerca de la victoria, al punto de que el arquero le contuvo un penal a Trezeguet. Los norteamericanos también se salvaron de quedar con diez jugadores en el primer tiempo, porque el zaguero argentino Tomás Avilés debió ser expulsado por doble tarjeta amarilla, al punto de que en el entretiempo fue sustituido por su compatriota Marcelo Weingandt. En el segundo tiempo, la figura fue el otro arquero, el veterano El Sharawy, de contrastada calidad y experiencia.

Un Inter Miami desarticulado pareció depender en exclusiva del talento de Messi, pero éste no tuvo tanto contacto con la pelota y fue bien bloqueado por un ordenado conjunto egipcio.

Si bien el partido comenzó con paridad, el conjunto egipcio apareció como más profundo, con transiciones a gran velocidad y con dos o tres toques ya se encontraba frente al arquero argentino Oscar Ustari. A los 10 minutos, el volante ofensivo Ashour quedó mano a mano con el guardavallas, que le tapó muy bien con el cuerpo, evitando de esta forma una pronta desventaja de su equipo.

Cuatro minutos más tarde, el entrenador del Al Ahli, José Riveiro, tuvo que realizar el primer cambio por lesión de Ashour, quien fue reemplazado por Zizo.

Los siguientes minutos acentuaron la impresión de que Al Ahly era un equipo mucho más ordenado que el Inter Miami, con mejores combinaciones y con mayor dominio de pelota y enseguida tuvo una segunda ocasión clara porque tras un centro corto por la izquierda de Ben Romdhane, casi concreta Fathy, pero el remate le salió corto y Ustari pudo llegar a controlar la jugada.

A los pocos minutos, una falta que le costó la tarjeta amarilla al argentino Tomás Avilés terminó en un tiro libre de Zizo en forma de centro, pero ninguno de los tres compañeros llegó para definir ante Ustari.

Era claro que de un lado había un equipo armado, con movimientos bastante mecanizados y buena conexión, y del otro lado, jugadores que individualmente trataban de sacar partido pero que no encontraban demasiado eco para compartir el juego y todo quedaba librado a lo que surgiera en las jugadas que trataba de iniciar. De hecho, el jugador más de punta de Al Ahli, Abou Alí, quedó dos veces en fuera de juego cuando se iba solo ante Ustari. Otra señal es que al cumplirse la primera media hora, Inter Miami ya tenía dos amonestados, ambos argentinos: Tomás Avilés y Federico Redondo.

Ustari acaso la figura del partido, alcanzó a desviar por encima del travesaño otro tiro libre de Abou Ali y volvió a lucirse con una nueva tapada a un cabezazo de Dari -sin marca- cuando todos los hinchas egipcios ya gritaban el primer tanto. Enseguida, el mismo Dari chocó con Lionel Messi y extendió demasiado la pierna, dejando al genio argentino muy dolido y en el suelo, aunque el hecho no pasó a mayores.

A los 39 minutos, llegó otra dura falta del marcador central Avilés, esta vez a Trezeguet, lo que le habría correspondido una segunda tarjeta amarilla y por lo tanto, la expulsión, pero permaneció en el campo. Sin embargo, un minuto después siguió el descalabro local cuando Telasco Segovia le hizo falta a Zizo dentro del área. Claro penal que ejecutó Trezeguet y Ustari volvió a lucirse atajándolo, aunque en el rebote, el volante egipcio tampoco pudo capitalizar la ocasión.

El fútbol es tan especial que el Inter tuvo su mejor ocasión en la última jugada del primer tiempo, luego de soportar el asedio rival durante gran parte del período. Un centro de Luis Suárez por la izquierda casi es empujado a la red por Tadeo Allende, pero llegó antes Dari para despejar en la misma línea del arco de Al Ahli.

Para el segundo tiempo, Inter Miami pareció salir decidido a cambiar el destino y a los 5 minutos, luego de un breve dominio territorial, un rebote generó que la pelota le quedara a Tadeo Allende para empujarla a la red, pero el veterano arquero El Sharawy tapó milagrosamente.

Todo daba a entender que el Inter dependía en exclusiva de alguna jugada de Messi, que llegó recién a los 13 minutos, pero su remate fue a las manos de El Sharawi y en la contra, un remate angulado de Zizo salió apenas desviado. El genio argentino, con más disposición de pelota que en la primera parte, abrió hacia la derecha al recién ingresado Weingand (por Avilés), pero éste remató afuera cuando estaba en una buena posición.

Messi tuvo otra posibilidad de convertir a los 18 minutos, con un tito libre ideal para él, con barrera, pero su remate rozó la red desde el exterior, provocando un efímero grito de gol en buena parte de los hinchas de Inter Miami.

A los 84 minutos, un centro de Messi desde la derecha encontró a Fafa (recién ingresado por Allende) solo para definir, pero su cabezazo fue tapado por El Sharawy en una excelente reacción, aunque se trató de una jugada aislada como parte de un más que discreto segundo tiempo.

Sobre la hora, Messi intentó otro de sus remates complicados de detener, pero volvió a encontrarse con un gran arquero como el veterano guardavallas de la selección egipcia, El Sharawy. Y en el siguiente córner de Luis Suárez, el defensor Falcón se anticipó con otro cabezazo al gol, pero volvió a aparecer el arquero africano ahogando la conquista.

Por Sergio Levinsky, desde Miami