Fluminense, que ya había eliminado en octavos de final al Inter de Milán con total claridad, volvió a plantear un partido a la usanza sudamericana, sin dar lugar al cambio de ritmo de los muy buenos jugadores rivales y aprovechando al máximo cada oportunidad de gol, y ahora espera en luego de semifinales, el 8 de julio próximo, por el ganador del partido que esta noche jugarán Chelsea y Palmeiras.

El volante Martinelli marcó el primer gol para Fluminense, empató el brasileño Marcos Leonardo (que llegó a cuatro tantos y alcanzó a Ángel Di María como goleador del certamen) y desequilibró Hércules, que había ingresado por Martinelli al comenzar el segundo tiempo.

Precisamente Martinelli y el lateral argentino Juan Freytes se perderán la semifinal por acumular dos tarjetas amarillas.

Desde los primeros minutos fue claro que Al Hilal no iba a encontrar ni los espacios ni la dinámica del anterior partido ante el Manchester City, por los octavos de final. Fluminense, con una línea de cinco defensores, copió el modelo que lo favoreció hasta ahora con equipos de mayores individualidades o de estilo europeo, como el Inter de Milán, al que venció con justicia.

Renato Portaluppi, el entrenador del Fluminense, planteó entonces otra vez un partido de Copa Libertadores de América aprovechando el clima y el rival: lento, de movimientos estudiados, trabado (al punto de que hubo varios amonestados) y casi sin llegadas hasta la pausa de hidratación, que es un clásico en este torneo, debido al calor.

Al regreso del descanso, después de la media hora, hubo un paulatino cambio en el Fluminense, que comenzó a llegar con algo más de profundidad, aunque tampoco lucía el colombiano Jhon Arias, de destacada actuación ante el Inter.

A los 38 minutos, un centro desde la derecha por parte del lateral Samuel Xavier fue cabeceado en el centro del área, de manera defectuosa, por el goleador argentino Germán Cano. Parecía que la pelota se iba por la línea de fondo pero el lateral portugués Joao Cancelo despejó con error, la pelota le quedó el volante Martinelli y éste sacó un excelente remate cruzado, al ángulo superior izquierdo del arquero Bounou, que estiró pero no pudo alcanzar la pelota.

Cuando se jugaba un minuto de descuento, un tiro libre por la derecha para Al Hilal, ejecutado con precisión por Milinkovic Savic, encontró el cabezazo franco del defensor Koulibaly, pero se lució el arquero brasileño Fabio (44 años) despejando a un costado.

Segundos más tarde, parecía que el árbitro neerlandés Danny Desmond Makkelie iba a cobrar penal por una supuesta falta de Samuel Xavier a su compatriota Marcos Leonardo tras un centro de Joao Cancelo desde la derecha al segundo palo, pero tras consultar con el VAER, anuló la decisión.

En el segundo tiempo, Fluminense se metió muy atrás, tal como hizo contra el Inter de Milán, pero le duró poco la especulación porque a los 6 minutos, un córner de Rubén Neves desde la derecha volvió a encontrar la cabeza de Koulibaly, pero éste, en vez de conectar hacia el arco como en el primer tiempo, prefirió bajar la pelota al goleador Marcos Leonardo, que, sin marca, empujó la pelota a la red, convirtiendo su cuarto tanto en el torneo.

A partir de ahí, el partido se abrió y fue muy distinto al primer tiempo. A los 9 minutos, un grave error de Renán Lodi, intentando un pase atrás al arquero Bono, dejó solo al goleador argentino Germán cano con el marroquí, que tapó brillantemente ante el intento de gambeta y definición.

Ya Fluminense había vuelto a emparejar las acciones y ante otra displicencia de la defensa del Al Hilal, en el minuto 25, el volante Hércules, que había entrado por Martinelli en el entretiempo, recuperó la pelota en campo contrario, sacó un remate que rebotó en un adversario, la pelota se elevó y allí el lateral Samuel Xavier aprovechó otro quedó defensivo, cabeceó hacia adelante y Hércules, que entraba solo por la derecha, sacó un remate cruzado que venció a Bono.

Después del descanso de refresco del segundo tiempo, cuando iban a quedar quince minutos, se pensó en un asedio de Al Hilal en busca del empate, pero fue al revés: casi llega el tercero del Fluminense por una gran jugada del colombiano Arias por la izquierda, que terminó con un muy buen remate de Samuel Xavier desde la derecha, que alcanzó a manotear Bono.

Los últimos minutos fueron dramáticos por el total dominio de Al Hilal, especialmente desde los córners, pero la defensa brasileña respondió con hidalguía.