En diálogo con Radio Jornada 91.9, el dirigente empresario Adolfo Trípodi trazó un crudo diagnóstico de la actividad comercial en Mendoza. 

Aunque reconoció que la inflación se ha desacelerado -estima que la de mayo rondará el 2,1 o 2,2%-, advirtió que "el consumo no repunta" y que algunos sectores están en una situación límite. 

La FEM ya pidió una audiencia con el gobernador Alfredo Cornejo para plantear medidas urgentes que eviten el cierre de negocios y la pérdida de empleos.

"Estamos viendo una economía que, si bien muestra datos positivos en el nivel general, esconde una gran desigualdad entre sectores que ganan y otros que están quebrando. Eso no es sostenible", sostuvo.

Una economía que crece, pero sin derrame 

Según Trípodi, si se analiza el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), la economía nacional está mostrando signos de crecimiento. Sin embargo, al desagregar los datos, queda en evidencia que ese crecimiento se concentra en pocos sectores: el agroexportador -favorecido por la quita de retenciones y una buena cosecha-, la energía, la minería y las finanzas.

"Los grandes ganadores son sectores con muy poca generación de empleo. El comercio minorista, los hoteles, los restaurantes y todo el rubro turístico están muy golpeados. Y estos sí son dadores de mano de obra", subrayó. 

Mendoza, por ser provincia de frontera, padece además la competencia del turismo de compras en Chile. "La balanza turística está arrojando un déficit de 500 millones de dólares mensuales. Es decir, los argentinos se van a gastar afuera. Acá vemos las colas para cruzar a Chile cada fin de semana", ejemplificó.

"La muerte de las pymes es silenciosa" 

Para Trípodi, la situación de las pequeñas y medianas empresas es alarmante, pero muchas veces pasa desapercibida. "Cuando una gran empresa echa 500 empleados es tapa de diario. Pero cuando una pyme cierra y deja dos o tres personas en la calle, nadie lo nota. El problema es que son miles", advirtió.

Por esa razón, desde la FEM mantuvieron una reunión con el sindicato de empleados de comercio y solicitaron formalmente una audiencia con el gobernador. La idea es conformar una mesa de diálogo entre el sector empresario, el sindicalismo y el Gobierno para pensar soluciones que frenen la caída del consumo y la destrucción del tejido productivo.

"Tenemos confianza en que Cornejo, que es un político experimentado y tiene llegada a la Nación, pueda ayudarnos a articular medidas. Pero necesitamos actuar ya", afirmó. 

Un déjà vu de los años 90 

Trípodi comparó el actual escenario con el de la convertibilidad en los años 90. "Es un calco. En aquella época se desprestigiaba la industria nacional, se abría indiscriminadamente la importación y se premiaba lo extranjero. Esa política destruyó a la pyme argentina", recordó. Para el titular de la FEM, Argentina no puede aspirar a desarrollarse solo exportando materias primas. 

"El mundo desarrollado pelea por quedarse con el valor agregado. Y eso lo hacen las pymes. No hay macro sin micro: no podemos tener una economía sana con un entramado productivo débil", aseguró.