El Gobierno de Mendoza, a través de la Subsecretaría de Transporte, presentó 10, de 16 nuevos colectivos impulsados a GNC que se incorporaron al sistema MendoTran. La iniciativa forma parte del Plan de Movilidad 2030, cuyo eje central es el concepto de un transporte sostenible que promueve el uso de tecnologías de bajas o cero emisiones.

En la actividad participaron el gobernador Alfredo Cornejo; el ministro de Gobierno, Infraestructura y Desarrollo Territorial, Natalio Mema; el subsecretario de Transporte, Luis Borrego; el presidente de AUTAM, Sergio Pensalfine; el presidente provisional del Senado, Martín Kerchner, y empresarios del transporte urbano.

Las unidades comienzan a prestar servicio en los diferentes recorridos del Gran Mendoza y pertenecen a las ocho empresas privadas que integran el sistema Mendotran. Cada vehículo cuenta con capacidad para 27 personas sentadas y un total de 90 pasajeros, además de incorporar ocho cámaras de seguridad internas que permiten registrar los viajes y reforzar la seguridad de los usuarios.

"La verdad que el transporte público de Gran Mendoza es un lujo", dijo el gobernador Cornejo, y agregó que "basta ya no solo compararlo con otras provincias argentinas, sino con cualquier ciudad del mundo". En ese sentido, mencionó que "es bastante masivo y lleva mucho subsidio, porque si no, no hay forma".

A esto, el ministro Mema le sumó que se trata de colectivos chinos a GNC de alta tecnología, que emiten solo 30% de gases de efecto invernadero comparados con los vehículos convencionales. "Es un primer paso, esto es de largo aliento porque la transición energética es con el GNC en Argentina, que es un país gasífero. Nosotros empezamos a apostar a esto hace 10 años, justamente para generar un consumo permanente de gas durante todo el año", sostuvo.

El funcionario destacó que la estrategia busca una reconversión gradual del sistema, con miras a futuras unidades eléctricas, y subrayó los beneficios económicos del GNC. "Esto consume más o menos en plata un 30 o un 40% menos, dependiendo del precio del gas y del combustible", indicó, y agregó que la idea es incentivar el uso de gas en el sistema mediante ajustes en el costo por kilómetro.

Precio del boleto y seguridad

En materia tarifaria, Mema aclaró que la audiencia pública para evaluar la tarifa técnica se mantiene vigente hasta fin de año. "Hoy estamos casi en la mitad de lo que tenemos margen de aumentar si es que queremos que el sistema se autofinancie. Vamos a esperar cómo nos va en el tratamiento de la ley de presupuesto", señaló, y destacó la importancia de mantener un subsidio estatal para sostener el sistema de transporte.

El ministro también repasó los avances en seguridad y tecnología para el transporte público, incluyendo cámaras conectadas al 911 y sistemas de georreferenciación para taxis. Sobre esto, afirmó: "Hemos puesto mucha tecnología en el sistema de transporte. Hoy todos los usuarios pueden saber en tiempo real cuánto falta para que llegue un colectivo" y destacó que estas medidas han permitido "prácticamente eliminar el delito arriba del colectivo".

Borrego destacó que las nuevas poseen una autonomía aproximada de 350 kilómetros gracias a la incorporación de ocho tanques de carga rápida. "Cada colectivo implicó una inversión de 250 mil dólares y, en conjunto, la incorporación representa una inversión total de 4 millones de dólares, un valor equivalente al de las unidades diésel, pero con la ventaja de ser menos contaminantes y tener un menor costo en combustible", remarcó.

También subrayó que Mendoza vuelve a posicionarse como provincia pionera en la aplicación de tecnologías limpias en el transporte público, en línea con una matriz productiva que dispone de gas y que permite avanzar hacia un sistema más sustentable. Agregó que esta incorporación es una experiencia "muy positiva y un paso intermedio hacia los vehículos eléctricos, que todavía presentan costos muy elevados".

Acciones conjuntas entre los sectores público y privado

Desde el sector empresarial también resaltaron el compromiso de acompañar las políticas provinciales que promueven un transporte público moderno y sustentable. Pensalfine indicó que "se trata de acompañar una política provincial que realmente sostiene el transporte público, que lo considera un valor esencial y que busca un punto justo de transición hacia energías más limpias".

Además, explicó que, si bien Argentina aún no reúne las condiciones estructurales para una reconversión total hacia vehículos eléctricos, "es necesario avanzar en una transición ordenada hacia tecnologías menos contaminantes, aprovechando que el país cuenta con gas y puede así contribuir al esfuerzo provincial con una estructura de costos más eficiente".

En ese sentido, precisó que, aunque la inversión inicial es más alta que la de un vehículo tradicional, se estima un ahorro del 20% en el consumo de combustible, lo que permitirá amortizar la inversión en un plazo estimado de entre cinco y siete años, dependiendo de factores económicos y políticos.

Actualmente, más del 90% de la flota provincial continúa funcionando con diésel, pero tanto el Gobierno como el sector privado coinciden en la necesidad de seguir ampliando las opciones menos contaminantes y con mejor rendimiento.