Arresto domiciliario y tobillera para Julieta Silva
La mujer condenada por la muerte del rugbier Genaro Fortunato deberá cumplir prisión preventiva en su casa, con tobillera electrónica, tras violar una restricción de acercamiento en una investigación por lesiones agravadas
El Juzgado Penal Colegiado N°2 de San Rafael resolvió que Julieta Silva, condenada por el homicidio culposo de Genaro Fortunato en 2017, cumpla prisión preventiva bajo la modalidad domiciliaria y con monitoreo electrónico. La medida se adoptó luego de que la acusada incumpliera la prohibición de acercamiento dictada en el marco de una nueva causa penal en la que se la investiga por lesiones leves agravadas contra su actual pareja, Lucas Giménez.
La medida se adoptó luego de que la acusada incumpliera la prohibición de acercamiento dictada en el marco de una nueva causa penal en la que se la investiga por lesiones leves agravadas contra su actual pareja, Lucas Giménez
La decisión fue tomada este viernes, tras una audiencia en la que el fiscal Fabricio Sidoti había solicitado que Silva permanezca alojada en un penal por riesgo de fuga y posible influencia sobre un testigo. El juez Claudio Gil descartó esa opción y ordenó el arresto domiciliario, solicitando informes al Equipo Técnico Interdisciplinario y al Juzgado de Familia para evaluar si la acusada está en condiciones de cuidar a su hija de un año, fruto de su relación con Giménez.
La nueva imputación se originó el 25 de julio, cuando Giménez denunció que Silva lo había agredido, provocándole una escoriación y una tumefacción. Personal policial constató las lesiones y el Ministerio Público Fiscal dispuso la restricción perimetral mientras avanzaban las pericias médicas y testimoniales.
El caso Genaro
Silva ya cumplía una condena de 3 años y 9 meses por el caso Fortunato, ocurrido el 9 de septiembre de 2017. Esa madrugada, a la salida de un bar de San Rafael, atropelló con su Fiat Idea al joven rugbier, provocándole la muerte por aplastamiento de cráneo. En 2019 fue hallada culpable de homicidio culposo agravado y recibió además una inhabilitación para conducir por ocho años.
En el nuevo expediente, la acusada seguirá privada de la libertad en su domicilio mientras se desarrollan las investigaciones, bajo el mismo régimen de arresto que ya había dispuesto la Cámara de Apelaciones en la causa anterior.
