Las autoridades de la Franja de Gaza, bajo control del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), informaron este miércoles que al menos ciento veinte personas murieron en las últimas veinticuatro horas debido a la ofensiva israelí, lo que eleva el total de víctimas desde el inicio del conflicto el siete de octubre de dos mil veintitrés a más de sesenta y un mil setecientas.

El Ministerio de Sanidad gazatí precisó que, en solo un día, llegaron a los hospitales ciento veintitrés fallecidos y cuatrocientos treinta y siete heridos, lo que eleva la cifra global a sesenta y un mil setecientos veintidós muertos y ciento cincuenta y cuatro mil quinientos veinticinco heridos. Las autoridades advierten que el número real podría ser mayor, ya que numerosas personas permanecen atrapadas bajo los escombros.

Desde que Israel rompió el alto el fuego acordado en marzo con Hamás, se han sumado más de diez mil doscientos muertos y cuarenta y dos mil cuatrocientos heridos a causa de los bombardeos y ataques terrestres.

A la violencia se suma la tragedia humanitaria: en las últimas veinticuatro horas, veintiuna personas murieron y ciento sesenta y cinco resultaron heridas cuando el Ejército israelí abrió fuego contra la población que hacía fila para recibir ayuda alimentaria. Con estos nuevos ataques, la cifra total de víctimas en estas circunstancias asciende a mil ochocientos cincuenta y nueve muertos y trece mil quinientos noventa y cuatro heridos.

La situación alimentaria es igualmente crítica. En las últimas horas, ocho personas incluidos tres niños fallecieron por inanición. Con estas muertes, el balance por hambre alcanza a doscientas treinta y cinco personas, de las cuales ciento seis son menores.