Una estación de servicio en Chaco, otra en Palermo, una más en Bariloche. Hasta ahora, todas vendían nafta al mismo precio, sin importar la hora o la demanda. Eso está por cambiar. YPF inaugurará el 24 de junio un centro de inteligencia en tiempo real desde donde podrá ajustar sus estrategias comerciales al instante en más de 1.600 puntos de venta en todo el país. Lo que antes se decidía con planillas, ahora lo definirá un algoritmo.

Se trata del Real Time Intelligence Center (RTIC), una estructura de control digital que funcionará desde la torre de YPF en Puerto Madero. Con este cerebro artificial, la compañía podrá aplicar "micropricing": precios variables según el momento del día, el consumo en la zona y otros factores que impactan la demanda. ¿La meta? Incentivar la carga de combustible en horarios poco concurridos y aumentar la rentabilidad minuto a minuto.

Del surtidor al software: una nueva forma de vender energía

El presidente de YPF, Horacio Marín, reveló la iniciativa durante su exposición en el Congreso Maizar. "Es mucho más que una sala de monitoreo. Es una plataforma de decisiones instantáneas que genera valor segundo a segundo", explicó. El nuevo sistema permitirá ofrecer descuentos durante la madrugada, cuando hay baja circulación pero los costos fijos siguen activos. También se integrará con un esquema de autodespacho: el cliente podrá cargar nafta sin necesidad de un operador, lo que reduce costos y mejora la experiencia.

Pero el alcance va más allá del precio en el surtidor. Desde el RTIC se podrá supervisar todo el proceso comercial, incluyendo el stock y las ventas en las tiendas Full. "Si no se venden hamburguesas en el Chaco, no mandamos más hamburguesas a esa estación. Mandamos lo que sí se vende. Es adaptar la oferta al comportamiento real del consumidor", explicaron fuentes de la empresa a Infobae.

El nuevo centro se sumará a los ya existentes para monitorear Vaca Muerta y la Refinería de La Plata, donde la inteligencia artificial ya está dando resultados en eficiencia y control. En este caso, el foco estará puesto en entender el flujo de vehículos, anticipar caídas de demanda, y decidir -en tiempo real- si conviene mantener personal, reducir precios o lanzar promociones específicas por horario o zona.

La revolución de la eficiencia: datos, decisiones y rentabilidad

La lógica detrás de este salto tecnológico responde a una premisa directa: cada estación debe ser rentable en cada minuto del día. Y para eso, hace falta información viva. El RTIC permitirá detectar tendencias de consumo, evaluar el impacto de campañas comerciales, ajustar la logística de distribución y enviar alertas cuando algo no funciona.

El nuevo sistema también estará conectado con la red de transporte de combustibles, lo que permitirá ordenar entregas según el ritmo de ventas y evitar sobrecargas o faltantes. Todo en tiempo real. "Queremos ganar plata en todo lo que hacemos", dijo Marín, al referirse a la estrategia global del plan 4x4, que también apunta a impulsar Vaca Muerta, el negocio del GNL y la eficiencia operativa.

YPF busca dejar atrás el modelo tradicional y abrazar una gestión inteligente en cada nivel de su operación. Desde los surtidores hasta los camiones cisterna, desde los snacks hasta la app de autodespacho, todo estará bajo una lógica única: leer lo que pasa, decidir al instante, mejorar el margen y adaptar el negocio a lo que el cliente realmente quiere, incluso antes de que lo diga.

La estación de servicio del futuro ya está en marcha. Y su combustible será la inteligencia artificial.