Humberto Grondona fue contundente al analizar el descenso de Arsenal de Sarandí. En entrevista con Jorge Barbieri y Orlando Abraham, en Ídolos y Anónimos (Radio Jornada 91.9), aseguró que el club "no aprendió de los errores" y responsabilizó a quienes permitieron el ingreso de "grupos que llegaron a hacer daño".

"El año pasado Arsenal se salvó por un punto. Este año, otra vez al borde. Si no corregís, te vas. Eso pasó", resumió. Y lanzó una frase fuerte: "Entraron bandidos al club. Trajeron jugadores de tachos de basura. El problema no es quién entra, sino quién los deja entrar".

www.jornadaonline.com/deporte/racing-y-river-a-todo-o-nada-por-la-copa-argentina

Grondona lamentó que no se haya consultado a gente con experiencia antes de tomar decisiones. "Lo vi venir, nadie llamó. Me duele porque fue un club ordenado hasta 2017. Después se perdió el control", dijo.

Sobre la dirigencia, evitó responsabilizar directamente a su hermano Julio Ricardo, quien estuvo al frente hasta el año pasado, pero admitió que "quizás confió en gente que se equivocó".

Respecto al modelo de gestión en los clubes, afirmó: "Estoy de acuerdo con gerenciamientos o sociedades anónimas, pero solo si hay transparencia. Vi buenas y malas experiencias. El problema es que muchos que entran al fútbol no tienen idea, pero sí intereses".

Grondona también habló de su presente en Rampla Juniors de Uruguay, donde actúa como asesor futbolístico. "No cobré todavía, pero me cubren casa, comida y viajes. Estamos cerca de mantener la categoría", comentó.

Sobre el fútbol argentino, criticó el sistema de descensos en la Primera Nacional: "Si se juntaran las dos tablas, Arsenal tendría más puntos que varios equipos del otro grupo. No se pensó en eso".

Por último, descartó estar vinculado a Deportivo Madryn, aunque reconoció que podría asistir a una posible final en la que participen. "No tengo relación con el club. Pero sería histórico para la Patagonia si logran el ascenso", cerró.