En 1993, el matrimonio compuesto por Emir y Noemí celebró la llegada de Franco Emir Coronel, oriundo de Ramallo (noreste bonaerense y pegado al Paraná). De niño, el chico se destacaba en fútbol y era de las joyitas del club Social Paraná. Se le recuerda, además, un récord asentado en la Liga de San Nicolás, categoría infantiles: 61 goles marcados cuando él tenía entre 9 y 10 años de edad. Ya en ese momento se identificaba con el gol como parte de su propia identidad.

Franco también jugó en el otro club grande de la zona: Defensores de Villa Ramallo, el mismo en el cual lo hicieron David "el mago" Ramírez y el propio Gabriel Gómez. Y desde allí pasó por Douglas Haig de Pergamino, Estudiantes de Río Cuarto, Olimpo de Bahía Blanca y nuevamente "Defe" de Villa Ramallo.

Por cuestiones de tipo personal hubo un momento en el cual hasta pensó en abandonar la práctica activa del fútbol, pero afortunadamente cambió de decisión.

Tras una gran temporada en Defensores, en la que se consagró goleador del Federal A con 18 anotaciones, aceptó el ofrecimiento de Gabriel Gómez y se incorporó al plantel "leproso".

En este arranque de temporada está pagando con goles esta oportunidad de vestir la camiseta azul: el primero, frente a Deportivo Maipú en el "Omar Higinio Sperdutti" y ayer, en el "Bautista Gargantini", el tanto del triunfo frente a Quilmes.

Según los datos que nos aportaron familiares y vecinos de Ramallo, a Franco le gusta cantar, tocar la guitarra, ir a pescar, pasar ratos libres en la isla - frente a la costa ramallense - y es una persona muy querida en el vecindario.

Uno de sus hermanos, Mateo, está en Argentinos Juniors, mientras que la familia se completa con su hermana María Emilia.

Casado con Camila, tienen un niño de 6 años - Dante - y un sobrino de 9 años - Felipe - también apasionados de la pelota y que juegan en infantiles de Social Paraná.

(Fotos/Gentileza: sus pasos por Defensores de Villa Ramallo, Olimpo de Bahía Blanca, Estudiantes de Río Cuarto y Douglas Haig de Pergamino)