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Tomba: del vértigo de los cambios a la paciencia de la reconstrucción

Tras haber quedado eliminado de la Copa Sudamericana, el "Expreso" debe hacer el duelo lo más rápido posible y trazarse el objetivo prioritario: dejar de lado la calculadora y poner proa mirando de reojo la tabla anual.

Fabián Galdi

Se ha puesto de moda en el ambiente futbolero la frase "hay que dar vuelta la página lo más rápido posible" y el sentido de la expresión es correcto en cuanto a la necesidad de retomar una  senda construida a base de resultados positivos, aunque también vale expresar que lo urgente no siempre va de la mano con lo prioritario.

Participar de copas internacionales es, hoy día, casi un paralelismo con sumar una estrella, pero no hay que confundirse. El desgaste físico y psicológico que implica programar una doble competencia simultánea suele caer en otra frase hecha: "una victoria a lo Pirro". Y esto deja sus secuelas. Parece una verdad de perogrullo, pero aquella recordada expresión de "Mostaza" Merlo cuando dirigía al Racing que llevaba 35 años sin títulos quedó incorporada al acervo futbolístico: "paso a paso".

Tomba: del vértigo de los cambios a la paciencia de la reconstrucción

Hoy en día, Godoy Cruz atraviesa procesos acelerado de recambio ya que, por ejemplo, en apenas ocho meses pasó por tres entrenadores diferentes: Ernesto Pedernera, Esteban Solari y, ahora, Walter Ribonetto.

"Cada maestrito con su librito" es otra expresión propia de la actividad docente, pero que se ajusta a la complejidad de un espacio de tan alto nivel de conflictividad como lo es el fútbol. 

En consecuencias, el margen de tolerancia cada vez es más chico y esto implica, ni más ni menos, que se retoma aquella frase que popularizó el "Bambino" Veira, cuando destacó que cada entrenador futbolístico se sienta en "la silla eléctrica" cada vez que sale a la cancha.

Tomba: del vértigo de los cambios a la paciencia de la reconstrucción

Hay en este modelo para armar que es el Tomba de hoy una necesidad de definir un sistema que termine de darle identidad a un equipo que asoma por ráfagas y que no logra estabilizar un patrón de juego que lo defina como referencia.

En la reciente transición Solari/Ribonetto se advierte que los jugadores habían incorporado conceptos tácticos del director técnico rosarino que, con el recién llegado entrenador, no se condicen con el plan actual.

Por ejemplo, con el "Tano" se había mecanizado el trabajar la acción escalonada en ofensiva a través de lo que la jerga denomina "la segunda pelota"; esto, traducción mediante, era provocar lanzamientos largos que podían ser devueltos por la ocasional defensa rival, pero donde Godoy Cruz tenia sistematizado cómo ocupar espacios en la cancha para capitalizar el rebote, ganando metros en campo rival y llegando al área con vistas al remate franco, el pase paralelo o hacia atrás y la triangulación a uno o dos toques para posicionarse en el área adversaria.

Tomba: del vértigo de los cambios a la paciencia de la reconstrucción

El método que está implementando Ribonetto está en la fase ensayo/error y se entiende el porqué: llegó, firmó, lo presentaron, entrenó y le tocó una seguidilla infernal: el ida y vuelta contra Atlético Mineiro más la visita intercalada a River Plate. Los resultados están a la vista: tres jugados, tres perdidos y con siete goles recibidos.

En la víspera, con el duelo ante el "Galo" en el Gambarte, la variante táctica que el coach introdujo en el segundo tiempo dejó tela para cortar: Daniel Barrea para asociarse con Agustín Auzmendi como doble nueve, pero también la salida del "Indio" Fernández que no terminó de entenderse porque el uruguayo traccionaba con su ida y vuelta abriendo espacios para luego buscarlo a Santino Andino o la proyección de Lucas Arce; en ambos casos para triangular en corto o en largo y generar opciones de definición a través del remate directo o el centro paralelo.

"Son decisiones", suele responder Miguel Russo cuando se le consulta acerca de planteos o reemplazos en pleno partido. En este caso, al técnico cordobés se le abre desde hoy la posibilidad de rearmar a un plantel que quedó maltrecho tras la derrota en casa, pero que debe mentalizarse como prioritario el sumar en el Torneo Clausura para escaparse rápido del incómodo puesto en la Tabla Anual y, por decantación, crecer con la mira en acceder a los playoffs de la segunda Copa de la Liga 2025.

Tomba: del vértigo de los cambios a la paciencia de la reconstrucción

Se dio comienzo hoy a la fase de reconstrucción y el próximo lunes habrá una oportunidad inmejorable para recomponerse, puesto que recibirá a Vélez Sarsfield, que mentalmente parece estar más metido en los cuartos de final de la Copa Libertadores que deberá afrontar frente a Racing que en el certamen local. 

Es la oportunidad para ganar el primer partido desde la reinauguración del Gambarte, pero también, para darle comienzo a un nuevo ciclo con vistas a la reconstrucción definitiva.

Tiene con qué demostrarlo y es ahora o nunca.

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