El gobierno de Uruguay resolvió suspender las clases presenciales hasta Semana Santa inclusive y cerrar las oficinas estatales -excepto aquellas que prestan servicios imprescindibles. Además, cancelar los espectáculos públicos, entre otras medidas destinadas a frenar los contagios.

La mayor parte de las acciones tendrán vigencia hasta el 12 de abril. Los eventos públicos quedarán suspendidos, así como también los bares y free shops en las fronteras.

En el mismo anuncio oficial se aseguró que aumentará la ayuda social del Gobierno y que se aplicará un impuesto a servidores públicos con el fin de recaudar fondos para contrarrestar las pérdidas económicas por la pandemia de Covid-19.

El último reporte de las autoridades sanitarias incluyó más de 1.800 nuevos contagios de covid-19. El total de casos en Uruguay llegó a 86.007, con 827 muertes vinculadas a complicaciones por el virus.