Opinión

El fútbol que viene

El Real Madrid se fue del Mundial de Clubes muy golpeado en lo deportivo, con una dura goleada por parte del PSG en semifinales (y pudo ser mucho peor si los franceses no se detienen por decoro en el segundo tiempo, apostando a llegar frescos a la final), pero con 75 millones de euros en el bolsillo, una cifra que para menos de un mes de participación, es casi imposible de conseguir.

Por Sergio Levinsky desde Madrid
Por Sergio Levinsky desde Madrid

Al mismo tiempo, el club blanco, acaso uno de los pocos en todo el mundo que cuenta con hinchas genuinos en los cinco continentes y fue local en Estados Unidos, es el que encabeza la lucha por cambiar el orden futbolístico europeo buscando un torneo alternativo a la UEFA Champions League, con más cantidad de partidos (lo que implica más TV) y otro formato, pero que de a poco fue perdiendo seguidores entre los clubes grandes, en base a que el torneo propuesto por el presidente Florentino Pérez no cumplía con la meritocracia necesaria y además, busca instalarse por fuera de la UEFA.

El PSG, gran derrotado en una final del Mundial que parecía a su medida luego de ganar, por fin, la Champions que tantos años se le negó, fue, junto con los clubes fuertes alemanes como el Bayern Munich y el Borussia Dortmund, de los que más resistieron la idea de cambio del Real Madrid, con el Barcelona y la Juventus tímidamente atrás como únicos laderos.

El fútbol que viene

Es que Nasser Al Khelaifi, el qatarí que preside el club francés, es, al mismo tiempo, miembro de la UEFA, presidente de la poderosa Asociación de Clubes Europeos (ECA), titular de la Federación de Tenis de Qatar y tiene mucho poder en BeInSports, canal que va consiguiendo cada vez más derechos de transmisión deportivos, y si sumamos la rebelión de los hinchas ingleses, que motivaron la intervención del entonces primer ministro Boris Johnson para que los clubes británicos no se sumaran a la iniciativa, Inter y Milan también se retiraron y dejaron solos al Real Madrid, al Barcelona y a la Juventus.

Las partes (UEFA y la nueva idea de la Superliga) fueron, entonces, a un juicio cuyo fallo final deja poca claridad sobre quién tiene razón pero dice algo concreto, y es que la UEFA no puede monopolizar la organización de certámenes continentales en el territorio europeo, es decir que había lugar para algo paralelo. ¿Pero, qué torneo podría ser éste, cuando la UEFA ya comenzó a adelantarse y desde la temporada 2024/25 implementó un formato con dos partidos más en la fase de grupos, que pueden ser hasta cuatro si hay que jugar un repechaje) y un sistema distinto de clasificación y bastante más dinero?

Esta semana fue clave, en cuanto a los clubes poderosos europeos por dos noticias: la primera, la resolución del pasado 9 de julio del Parlamento británico por 415 votos contra 98, de la creación de un "Independent Football Regulator" que controlará los gastos de lo clubes y otorgará más poder a los aficionados en la toma de decisiones para frenar los tremendos gastos como en este verano, que superan los mil millones de euros en fichajes, pero además, este órgano se reserva la prohibición a los clubes británicos de participar "en competiciones cerradas y ligas independientes", lo que no es otra cosa que un masazo a la posible Superliga futura.

La otra noticia relevante la dio el presidente del Barcelona, Joan Laporta, quien en una entrevista con el diario "Mundo Deportivo" de la ciudad condal, comentó que viene conversando con el titular de la UEFA, el esloveno Alecsander Ceferin, en la confección de un torneo unificado, que pudiera tener aspectos buscados por la nueva idea de campeonato continental con la vieja entidad europea, y que consistiría, especialmente, en la posibilidad de que los partidos, todos, sean gratis para que se vean por la TV.

El fútbol que viene

Y para que esto ocurra, una de las pocas posibilidades pasan por la intervención de una TV muy poderosa, de grandes capitales, que pudiera absorber este gasto y este servicio, tal como ocurrió con el reciente Mundial de Clubes de los Estados Unidos y DAZN, cuyos capitales aparecieron luego de que Arabia Saudita obtuvo la sede del Mundial 2034 sin ninguna oposición porque, sorpresivamente (¿o no tanto?) Australia retiró su candidatura en los últimos instantes.

Con esta nueva situación, el mundo parece ir entrando en una especie de nueva "Pax Futbolera" que todavía necesita congeniar más el calendario que el dinero o los formatos de torneos y ese es un conflicto que la FIFA deberá sortear cuando se vio acechada, durante el Mundial de Clubes, por un sindicato mundial, FIFPRO, que había tenido poca voz y voto en el pasado, y que ahora parece rebelarse de la mano del nuevo titular, el argentino Sergio Marchi, ex secretario general de Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA) y que trató de "emperador" a Gianni Infantino y hasta dijo en un comunicado que el titular de la entidad madre del fútbol "se cree Dios".

Con capitales árabes y norteamericanos cada vez más incorporados al mundo del fútbol, ya sea en acciones en clubes por medio de fondos estatales o privados según el caso) ahora llega el momento de resolver lo urgente: Infantino quiere un Mundial de Clubes cada dos años, para recaudar más, y con más clubes participantes (48) para agrandar la torta hasta donde se pueda. Las quejas de clubes como Barcelona o Liverpool tiene cierta lógica: ganaron sus ligas, fueron protagonistas de la última Champions, pero se tomó en cuenta el período 2021-24 y entonces la temporada 2024/25, que es la estrictamente actual, recién entra en el período siguiente, para el supuesto Mundial de 2029, que podría jugarse en España y Portugal, Brasil o Qatar.

El fútbol que viene

Unificado el torneo europeo y con aumento de equipos y quizá cada dos años el Mundial de Clubes, el próximo paso es el Mundial de selecciones de 2026 en Canadá, México y Estados Unidos, luego de las falencias y problemas que aparecieron en la organización del reciente torneo de clubes.

Si el transporte y la infraestructura de estadios que en su mayoría están preparados para albergar otros deportes aparecen como grandes dificultades a resolver, hay otra muy importante y es el de la atracción del fútbol por parte de la colectividad latina residente en los Estados Unidos, porque no se termina de lograr la adhesión del resto, por lo que más que soccer, el deporte que gusta sigue siendo "fútbol".

Por más que Infantino haya sostenido que lo que a la FIFA le interesa es "la seguridad de los espectadores", llevando una vez más la discusión al terreno estrictamente futbolístico (un ejemplo de ello podría ser la obligatoriedad de llevar a los estadios sólo bolsos transparentes, con lo cual las grandes tiendas de los alrededores hacen pingües negocios con los olvidadizos), la problemática mayor pasa por el miedo de buena parte del colectivo latino por ser deportado, de perder las chances de seguir viviendo en el país debido a la permanente amenaza de redadas en las tribunas o alrededores de los estadios buscando indocumentados.

Esto generó cierta ausencia de público en algunos estadios durante el Mundial de Clubes, o la negativa a dar sus nombres en algunas encuestas o entrevistas en los alrededores de los estadios.

Anahí Viladrich, catedrática en Sociología del Queens Colege y el Centro Graduado, The City University of New York, y estudiosa desde hace años de la construcción social de latinidad dentro de la temática de Etnicidad e Inmigración, sostuvo al respecto, en diálogo con Jornada, que la situación de irregularidad de la población latina, "se incrementó en los últimos tres años".

Viladrich le coloca una definición concreta a la situación que vive la comunidad latina en los Estados Unidos: "Panóptico foucoultiano de la autodisciplina del miedo" y lo explica de esta manera: "Los latinos, con toda razón, tienen terror de salir a la calle, de estar en un espacio público, donde, por empezar, se los identifica por portación de cara. La portación de cara latina es un indicador de exposición pública a la posibilidad de que te detengan. Hablamos de gente sin papeles o de familias mixtas (por ejemplo, un niño estadounidense con el padre indocumentado, donde incluso puede que uno hable inglés y el otro no), o sea que en ese caso está la barrera del idioma, la barrera de la ilegalización y la barrera de la portación de cara. Esto no sucede sólo en el estadio, sino en el supermercado".

La socióloga y experta en el tema cuenta lo que ocurre con este colectivo en la práctica cotidiana: "Hay días en los que no hay nadie, pero se corre la voz que está ICE (Inmigration and Customs Enforcement), está Homeland Security (Seguridad Nacional) haciendo redadas latinas y con el rumor, es suficiente para que la gente se disperse, no salga a la calle, o vaya de la casa al trabajo y del trabajo a casa. En este caso, es un mecanismo de autodisciplina y de autoprotección, no sólo para ellos sino también para sus familias. Esto fue lo que logró Donald Trump".

"Así es que los inmigrantes -insiste Viladrich- evitan lugares en los que pueden convertirse en una audiencia cautiva, es decir, donde pueden ser encerrados y los estadios son el espacio ideal para ser identificados y detenidos y llevados a procesos de deportación o deportados directamente, como los venezolanos fueron llevados a El Salvador. Es una amenaza inmanente, presente".

La situación del control sobre los inmigrantes, especialmente del colectivo latino, el más cercano al fútbol, plantea entonces el desafío sobre cómo conseguir que, por un lado, asistan a los partidos y por otro, que no desistan ante el miedo a una redada o una deportación. En este sentido, Viladrich sostiene que Trump "es contradictorio en la enunciación de políticas antiinmigratorias y racistas y xenofóbicas porque al final termina necesitando del colectivo para sectores como la agricultura o servicios porque sin ellos, el país se cae y los estadios son otro síntoma de ese aparato contradictorio: si por un lado necesitamos llenar los estadios, no tiene sentido perseguir a los que alimentan en este país el amor al fútbol". "Me imagino -prosiguió- que lo van a ir piloteando, harán excepciones y cuando se acerque el Mundial harán anuncios para que la gente se quede tranquila y no tenga miedo a las redadas o, por el contrario, puede querer publicitar esta política antiinmigración porque se acerca la elección de mediano plazo y necesita asegurarse el voto blanco va a ejercer entonces una política de terror a través de los medios y sus redes sociales. Trump se caracteriza por un doble juego permanente: terror y tranquilidad en su máxima potencia".

Con Infantino recostado en el presidente de los Estados Unidos para su apoyo político no sólo para el Mundial 2026 sino para el paulatino traslado de la FIFA desde Zurich a Nueva York (y precisamente a las oficinas de la Torre Trump), ya el gobierno anuncia que en el gran torneo del año que viene no habrá exención de visados tras el veto migratorio que hizo a doce países, entre ellos Irán, ya clasificado, junto con los de Afganistán, Myanmar, Chad, República del Congo, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Haití, Libia, Somalia, Sudán y Yemen, y restricciones parciales para los de Burundi, Cuba, Laos, Sierra Leona, Togo, Tukmenistán y Venezuela.

Esto significa que los hinchas iraníes que no vivan en los Estados Unido no podrán alentar a su selección y acaso lo harán con mucha dificultad los de la "Vinotinto" si consigue el histórico pase a su primera participación.

El fútbol se va acomodando poco a poco al nuevo mundo que lo espera.

Esta nota habla de:
Últimas noticias de opinión
Opinión

Sin querer, niño de 14 años, balea a su hermanito, de 10. Las armas en casa traen muerte.

Sin querer, niño de 14 años, balea a su hermanito, de 10. Las armas en casa traen muerte.
Hará un mes, la noticia nos avisaba y nos advertía. Un niño de 14 el viernes 20 de junio, con un balazo hirió a su hermanito, de 10 años. La información ya se traspapeló, desapareció del mapa. Digerimos tan rápido ¿porque estamos acostumbrados a la muerte?
Opinión

Mercedes Sosa cumple años todos años, porque nació para respirar el 9 de Julio del 1935

Mercedes Sosa cumple años todos años, porque nació para respirar el 9 de Julio del 1935
Mercedes Sosa está cumpliendo años el 9 de julio. Fecha inolvidable para un ser inolvidable. Celebremos el nacimiento, celebremos como las diosas y los dioses mandan. Celebremos porque, como corearon las tribunas del fútbol: La Negra no se fue / la Negra no se va...