Un impresionante accidente sacudió este domingo la sexta fecha de la Fiat Competizione, en el autódromo de General Roca (Río Negro). En plena segunda final, el piloto Juan Ignacio Álvarez protagonizó un despiste con su Fiat Cronos que terminó en un vuelco estremecedor.

El auto giró en reiteradas oportunidades, incluso dos veces en el aire, antes de quedar completamente destruido contra las defensas de seguridad del circuito. El siniestro ocurrió en la séptima vuelta, luego de que el vehículo sufriera aparentemente una falla en el sistema de frenos al tomar una curva.

A pesar de la violencia del impacto, Álvarez consiguió salir por sus propios medios, lúcido y consciente. Fue atendido rápidamente por el equipo médico de la categoría y trasladado de inmediato a un centro de salud local para estudios preventivos.

El sitio especializado Carburando informó que los primeros diagnósticos arrojaron una fractura de clavícula y fuertes dolores en ambos pies. Sin embargo, el corredor se encuentra fuera de peligro, lo que llevó alivio tanto a su equipo como al público presente.

La competencia debió ser neutralizada con auto de seguridad, mientras los rescatistas retiraban el vehículo siniestrado. Tras varios minutos, la carrera volvió a ponerse en marcha y fue Daniel Cosenza quien se quedó con la victoria, seguido por Agustín Roberi y Ramiro Lafuente en el podio.

Aunque la rápida reacción del personal médico evitó consecuencias mayores, el episodio reabrió el debate sobre la seguridad en las categorías nacionales. La presunta falla en los frenos será ahora objeto de peritajes técnicos en los próximos días.