El árbitro mendocino Espinoza volvió a ser criticado por sus ademanes ante los jugadores
El referí tomó un rol protagónico durante su arbitraje en el duelo de la víspera entre Unión y Estudiantes, disputado en Santa Fe y por la primera fecha del certamen.
En Santa Fe, el árbitro Fernando Espinoza cobró nuevamente protagonismo en el duelo entre Unión y Estudiantes por su excéntrico modo de manejarse frente a los futbolistas, con una postura que roza lo soberbio.
Anoche, el mendocino se puso cara a cara con Lautaro Vargas, del "tatengue", tras haberle mostrado la tarjeta amarilla.
Iban 36' del segundo tiempo y el local seguía venciendo 1-0, hasta que el lateral recibió la amonestación por una falta a Edwin Cetré y, al regresar a su puesto, quedó cara a cara con el árbitro, quien sacó el pecho para afuera y lo toreó.
La cuestión es que Vargas le contestó al referí pero evito hacerlo en modo agresivo y regresó a su posición cuidándose de una posible segunda amonestación.
De todos modos, la actitud del juez parece haberse convertido en una costumbre, al punto de que en el ambiente futbolístico se lo juzga como arrogante y de tono prepotente para con los futbolistas o un cuerpo técnico sea el que fuera.
EL GOL