SIDE

El Gobierno reveló que la SIDE detectó una red de espías rusos que operaban en el país

La SIDE identificó a una red de origen ruso operando en Argentina con fines de desinformación e influencia política.

El Gobierno nacional anunció el descubrimiento de una red de espionaje integrada por ciudadanos rusos que operaban desde la Argentina con objetivos contrarios al Estado nacional. La información fue difundida este miércoles por el portavoz presidencial, Manuel Adorni.

La Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) fue la encargada de llevar adelante la investigación que permitió detectar maniobras sospechosas por parte de personas originarias de Rusia radicadas en el país. Según detalló Adorni, los involucrados recibían financiamiento y actuaban alineados con los intereses geopolíticos de Moscú. En ese contexto, el vocero también resaltó la creación del Departamento Federal de Investigaciones (DFI), dentro de la órbita de la Policía Federal Argentina, con el propósito de enfrentar estructuras delictivas complejas.

Durante la pesquisa, los agentes identificaron una organización conocida como "La Compañía", con vínculos con el gobierno ruso y asociada al denominado "Proyecto Lahkta", encabezado por el empresario Yevgeniy Prigozhin, fallecido en agosto de 2023. Esta red tenía como referente local a Lev Konstantinovich Andriashvili, un ciudadano ruso residente en Argentina, quien coordinaba las operaciones y el flujo de fondos, acompañado por su esposa Irina Iakovenko, también instalada en el país.

 Lev Konstantinovich Andriashvili

Adorni explicó que el objetivo de "La Compañía" era reclutar personas afines a los intereses rusos, con el fin de desplegar campañas de desinformación y acciones dirigidas contra el Estado argentino. Entre sus tareas se incluían: la producción de contenidos digitales, la influencia sobre fundaciones y ONG locales, la organización de focus groups y la recolección de información política.

"Argentina no permitirá ser manipulada por intereses extranjeros", sostuvo el portavoz, quien destacó la puesta en marcha del Departamento Federal de Investigaciones, presentado por el presidente Javier Milei junto a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.

 Irina Iakovenko, esposa de Lev Konstantinovich Andriashvili

La nueva unidad actuará bajo los estándares del FBI estadounidense, y se concentrará en investigaciones profundas contra el narcotráfico, el terrorismo y redes del crimen organizado, según explicó el funcionario. Para ello, se rediseñará el perfil de los agentes, se implementarán nuevos programas de formación y se sumará personal especializado en abogacía, informática y psicología social, entre otras disciplinas.

En conclusión, el vocero enfatizó que la creación del DFI dentro de la Policía Federal Argentina representa un paso importante para fortalecer la seguridad nacional y proteger la soberanía del país frente a posibles amenazas externas.

 Una familia de espías rusos 

Un matrimonio ruso, Artem Dultsev y Anna Dultseva, vivió durante una década en Buenos Aires bajo identidades falsas argentinas: María Rosa Mayer Muños y Ludwig Gisch. Allí nacieron sus hijos, lo que les permitió obtener la ciudadanía argentina y construir una fachada de familia común con trabajos online.

 Artem Dultsev y Anna Dultseva, matrimonio de espías rusos que pasó una década en Buenos Aires realizando tareas de inteligencia. Obtuvieron pasaporte argentino.

Con pasaportes argentinos, bajo los nombres de María Rosa Mayer Muños y Ludwig Gisch, la dupla logró pasar desapercibida y crear la fachada de una familia "tradicional" que trabaja de manera remota con negocios en línea. Vivieron en el barrio porteño de Belgrano y mantuvieron un perfil bajo: pagaban los impuestos y enviaban a los niños a la escuela. Una familia como cualquier otra.

En 2017 se mudaron a Eslovenia, donde continuaron su perfil bajo como supuestos expatriados argentinos. Él dirigía una empresa informática y ella una galería de arte online, ambas usadas como pantallas para actividades de espionaje.

 Artem Dultsev y Anna Dultseva fueron recibidos con honores por Valdimir Putin al llegar a Moscú

En diciembre de 2022, fueron detenidos por espionaje y condenados en Liubliana. Tras cumplir 19 meses de prisión, en agosto de 2024 fueron liberados en un intercambio y recibidos en Moscú por Vladimir Putin, quien los condecoró con medallas y honores oficiales.

Esta nota habla de: