Detectaron cinco contagios de viruela símica en una familia del Gran Mendoza
Tres adultos y dos niños, pertenecientes a una misma familia, fueron diagnosticados con viruela símica en el Gran Mendoza. Los contagios ocurrieron dentro del entorno doméstico y las autoridades activaron el protocolo sanitario.
El Ministerio de Salud de Mendoza, a través de la Dirección de Epidemiología, confirmó cinco casos de viruela símica en la provincia durante la semana epidemiológica 23 de 2025. Los infectados, tres adultos y dos menores, pertenecen al mismo núcleo familiar del Gran Mendoza, y los contagios se produjeron por transmisión intrafamiliar, es decir, dentro del entorno de convivencia.
La doctora Andrea Falaschi, jefa de Epidemiología, explicó que el caso se detectó inicialmente en dos personas adultas internadas en un hospital del Gran Mendoza. A raíz de esa notificación, se amplió la investigación y se identificaron tres infectados adicionales, todos convivientes. "Estamos realizando el seguimiento epidemiológico correspondiente", afirmó.
Los niños asisten a una escuela de Las Heras y otra de la Ciudad de Mendoza, y las autoridades sanitarias ya pusieron en marcha los protocolos preventivos, con monitoreo activo de los contactos estrechos.
La viruela símica, también conocida como viruela del mono, es una infección causada por un virus conocido desde 1970. La variante que circula actualmente en América pertenece al clado 2, originario del oeste africano, y ha sido responsable de varios brotes recientes en países de Europa y América. La transmisión se da por contacto directo con lesiones en piel o mucosas, y también puede producirse durante relaciones sexuales.
Desde 2022, Mendoza ha registrado 31 casos sospechosos de esta enfermedad, de los cuales 15 fueron confirmados. "Hasta ahora, los diagnósticos estaban vinculados a adultos con transmisión por contacto íntimo sexual, pero este es un caso de contagio familiar directo por cercanía con las lesiones", detalló Falaschi.
En cuanto a los síntomas, la doctora indicó que la enfermedad comienza con fiebre, dolor corporal, cefalea e inflamación de ganglios, y luego aparecen lesiones cutáneas, similares a las de la varicela. "Son vesículas que aumentan de tamaño, se umbilican y luego forman costras", explicó. A diferencia de la varicela, en este caso el paciente es contagioso desde la aparición de las lesiones hasta que se caen las costras, proceso que puede durar alrededor de tres semanas.
Las erupciones pueden aparecer en el rostro, tronco, extremidades y también en áreas genitales o anales, siendo en ocasiones dolorosas y capaces de generar síntomas como proctitis o sangrado.
Finalmente, Falaschi recomendó que ante la presencia de síntomas compatibles o lesiones en la piel, se consulte rápidamente al médico para confirmar el diagnóstico. "No hay que alarmarse, porque puede tratarse de otras enfermedades como la varicela, pero es clave acudir al sistema de salud para recibir la atención adecuada", remarcó.
Como medida preventiva, las autoridades sugieren evitar el contacto estrecho con embarazadas, niños pequeños o personas inmunocomprometidas, usar barbijo, cubrir las lesiones, y restringir el contacto con mascotas dentro del hogar.