El 1º de mayo se celebró el Día del Trabajador. The Monkey, la banda tributo a la Mona Jiménez, realizó un streaming con el objetivo de recaudar dinero para los músicos, debido a que las nuevas restricciones anunciadas por el Gobierno de Córdoba afectaron el normal desarrollo de su actividad.

Eran las 00:20. Desde un estudio de grabación, ubicado frente a la Plaza Lavalle, en barrio San Vicente, el cantante José Sarmiento, con su voz arrasadora, inició el baile. Del otro lado de la pantalla, estaban sus fieles seguidores. Sin embargo, a la 01:00 fue suspendido: efectivos de la Policía de Córdoba desactivaron el show en medio de la transmisión en vivo.

Habían pasado 30 minutos y, a pesar del cumplimiento de los protocolos específicos para este tipo de actividad dispuestos por el COE y de no haber público presente, debió ser cancelado. “Lamentablemente no podemos seguir”, expresó con profunda tristeza Sarmiento. 

“No estamos cometiendo ningún delito, simplemente llevando alegría a las casas de ustedes. Quizás sea una orquesta de las que menos plata tiene por eso nos están odiando. Si hubiéramos sido millonarios, hubieramos comprado todo y no pasaba nada. Pero bueno, somos pobres y tenemos que cortar“, sentenció mientras seguía en vivo y se despidía con los últimos tres temas.

Por su parte, Javier Quassollo, locutor y dueño de la banda, dejó un mensaje en las redes sociales. Allí manifestó su enojo ante las autoridades competentes por la falta de control en la noche cordobesa, donde las fiestas clandestias se volvieron moneda corriente.

“Esto no me pasó nunca en todos los años de carrera que tengo en la música, que la autoridades corten a la gente que trabaja y hace las cosas bien mientras que clandestinas y la gente que hace las cosas mal sigue como si nada. Músicos artistas ya estamos al límite un streaming, con toda la seguridad y protocolos correspondientes dentro de una sala acustizada a la gorra para que nuestros músicos pueden tener algo de dinero en el día del trabajador y nos cortan, nos amenazan de pintarnos los dedos como un asesino un violador o un ladrón. De esa forma se nos trató”.

“No nos dejan trabajar, vivimos de la música, le buscamos la vuelta para seguir, para poder llevar el pan a nuestras mesas, para que nuestros hijos puedan comer. No sabemos robar, no sabemos hacer una clandestina, entonces cómo hacemos señor Presidente, Policía de Córdoba, gobernador Juan Schiaretti”.

“Gracias a todos por el apoyo brindado. La gente nos da fuerza a seguir. Pero todo tiene un límite. La pregunta es colegas ¿hasta cuándo? ¿O hay que tener plata para poder hacer un streaming?”.